Ubicada en un valle montañoso a dos horas en auto del centro de Beijing, la Capilla del Sonido es una sala de conciertos monolítica al aire libre con vista a las ruinas de la Gran Muralla China de la época de la dinastía Ming. Diseñado por la firma de arquitectura de Beijing, OPEN, el edificio se construyó en su totalidad con concreto y rocas locales ricas en minerales, para que pareciera una roca misteriosa que cayó suavemente en su lugar. El edificio cuenta con un anfiteatro semiabierto, un escenario al aire libre, miradores y una sala de ensayo.
Aunque diseñado para capturar, en medio de la naturaleza, la experiencia intrigante y profundamente conmovedora de la música en vivo, los arquitectos también querían que la gente se relajara y escuchara los sonidos de la naturaleza, que creen que es profundamente inspirador y revitalizante. Cuando no hay espectáculos, la sala de conciertos también es un lugar tranquilo para la contemplación y reuniones comunitarias con impresionantes vistas del cielo y el paisaje circundante.
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